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Recogida firmas para equiparar los derechos de las empleadas del hogar

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por Sofia Trevino Última modificación 24/05/2015 08:05
Según la última EPA, de las 44.600 trabajadoras activas del sector en la Comunidad sólo el 43,87% están actualmente dadas de alta

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CCOO comenzó este martes a nivel nacional una recogida de firmas con la cual confían en llegar antes de que acabe el año al medio millón de adhesiones, para exigir al Gobierno español la ratificación del convenio 189 de la OIT que garantice unas condiciones laborales dignas para las trabajadoras del hogar. En la actualidad, según los últimos datos de la EPA, Castilla y León cuenta con 44.600 posibles activas de este sector, pero sólo 19.567 (el 43,87 por ciento) están dadas de alta en la Seguridad Social, unas cifras que equivalen a un alto volumen de economía sumergida, según explicó la secretaria regional de la Federación de Construcción y Servicios del sindicato en la Comunidad, Inmaculada de Pablos.

En todo el país, alrededor de 600.000 mujeres trabajan en el sector doméstico, pero más de 370.000 lo hacen en situación irregular, pese al acuerdo de integración en el régimen general de la Seguridad Social suscrito por la Administración central junto a CCOO y UGT el 27 de junio de 2011. Gracias a aquel cambio en la normativa, en 2012 se produjo en Castilla y León un incremento de altas cifrado en 7.000 trabajadoras, pero la regularización de las profesionales “se ha estancado” desde entonces, por lo cual CCOO inicia ahora esta recogida de firmas, que presentará al partido que se imponga en los comicios generales que se celebrarán el próximo mes de noviembre.

Desde hoy mismo y hasta el 29 de mayo, CCOO habilitará en diferentes calles de las principales ciudades del país mesas para la recogida de firmas, en una iniciativa que se repetirá puntualmente en los próximos meses, con el reto de “visibilizar” el problema al que se enfrentan muchas trabajadoras en situación irregular. “Las empleadas domésticas tienen derecho a la negociación colectiva y a avanzar en sus condiciones laborales, homologándolas a las del resto de trabajadores. Se trata de una responsabilidad del empleador pero las trabajadoras tienen derecho a exigir que se regularice su situación con un contrato escrito, donde se contemplen condiciones para un trabajo digno y la jornada máxima”, apuntó De Pablos, que además reivindicó para ellas cobertura del Fogasa y su derecho a percibir prestaciones de la Seguridad Social en caso de desempleo.

La representante sindical expuso que “en 2011 no se podía plantear un cambio normativo radical, pero ahora, cuatro años después, es posible y razonable pedir la ratificación de aquella normativa”. Además, apuntó que desde CCOO han reclamado al Estado que contemple la posibilidad de ofrecer incentivos fiscales a aquellos empleadores que se vean obligados a contratar estos servicios “si el sistema no cubre sus necesidades”.

Las extranjeras, más damnificadas

Junto a De Pablos, intervino la coordinadora de los Centros de Información a Trabajadores Extranjeros (Cite) de CCOO en la autonomía, Cristina de la Torre, que explicó que el 97 por ciento de los trabajadores domésticos son mujeres, y que más del 60 por ciento de las consultas de extranjeros gestionadas por los Cites se dedicaban a tareas domésticas. Según expuso, en Castilla y León el paro de los extranjeros es once puntos superior al resto, alcanzando el 32 por ciento, y el empleo doméstico es el que más puestos de trabajo genera, ocupando a más de una de cada dos asalariadas foráneas.

“El empleo sumergido es muy grande en este sector, y ello genera problemas añadidos en el caso de las trabajadoras extranjeras, que no pueden regularizar su situación en España ni contemplar la posibilidad de reagrupar sus familias. Hemos detectado que en muchos casos, principalmente en el medio rural, las condiciones de trabajo son de semi esclavitud, y desde la aprobación de la nueva normativa en 2011 hay empresas de formación en autoempleo que han entrado en este sector para reducir considerablemente los escasos márgenes de las trabajadoras. Lo que pretendemos en CCOO es que las propias empleadas puedan gestionar su cartera de clientes”, señaló.

Además, denunció que en muchos casos realizan su labor expuestas a considerables riesgos laborales, entre los que citó la exposición a agentes tóxicos, la ergonomía, cuestiones de estrés y riesgos psicológicos al tener que estar alejadas del resto de su familia,e incluso acoso laboral.

Source: leonoticias.com

Story Type: News

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